viernes, 4 de noviembre de 2011

Hombre afortunado (y 2)

"No me aflijo como un hombre sin esperanza"

Muchos de vosotros que me leéis, sé (¡ay,  y yo casi también), os aferráis al "no hacer lo que ellos hacen" olvidando desear alcanzar la plenitud "que sí predican"
Pero el abismo es cada vez más grande. Así lo indica el signo de nuestro tiempo.
¿Quíen de nuestros hijos sabe qué y cómo se usa un arado?
¿Acaso sabe, le hemos enseñado, qué es el esfuerzo por el pan de cada día, por el sudor de nuestra frente ganado?
Hombres sin esperanza.
Campos estériles, así preñados... ¡abortarán y al cielo mismo nos señalarán!
¿Qué hacemos con nuestros hijos? ¿Qué sabiduría les estamos mostrando?
El pródigo Padre no dudó en enfrentarse a sus dos hijos
A menor por impaciente; al mayor por... "comedido"
A los dos supo esperar, a la puerta de cada cual... con amor
Nosotros... ¡frente a la "nitendo" les dejamos... y bien callados!
Insisto:
¿Qué enseñamos a nuestros hijos?
¿Moralejas de viejas lámparas de aceite?
¿Qué saben ellos, viajeros de autopistas celestes?!
El conocimiento es Amor.
Amar es... transmitir Sabiduría
Y no hacerlo, o fallar en ello... es...
no lo sé bien...
mas ¡ay.... sé cuánto me dolería!

¡Pero no! ¡No me aflijo!
No soy un hombre sin Esperanza
Al contrario: en Ella tengo mi cobijo

3 comentarios:

  1. Hola Su Chuco:
    La Esperanza debe de permanecer con nosotros, hasta que el Señor nos llame a su lado.
    un abrazo, Montserrat

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  2. Hola Hermano, es una delicia poder leerte. Esos versos que son un remanso de ideas dentro de un mar de oscuridad. Que Dios te bendiga a ti y tus verso y te dé animos para seguir adelante con esta tarea nuestra de querer dejar un legado escrito, desde Jaén un abrazo y feliz semana

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  3. Solo he de decirte que tu esperanza es melancòlica, nuestros hijos aprenden como nosotros aprendimos de nuestros padres, hay otra forma de vida, ni mejor ni peor, solo diferente. Solo tenemos que pensar en verde y como el sol sale todos los dias estar contento con lo que la madre naturaleza nos da, ya es suficiente para llenarnos de optimismo.

    un fuerte saludo

    fus

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